A lo largo de miles de años, la respuesta al hambre, la peste y la guerra permaneció invariable. Los mismos tres problemas acuciaron a los pobladores de la China del siglo XX, a los de la India medieval y a los del antiguo Egipto. La hambruna, la peste y la guerra estuvieron siempre en los primeros puestos de la lista. Pero, a lo largo del último siglo, la humanidad ha logrado lo imposible frenando la hambruna, la peste y la guerra. Por primera vez en la historia, más personas mueren por obesidad que por pasar hambre y hay más probabilidades de quitarse la vida que de morir en un conflicto bélico o un atentado terrorista.
El historiador Yuval Noah Harari escribe en este libro que generación tras generación los seres humanos rezaron a todos los dioses, ángeles y santos, e inventaron innumerables utensilios, instituciones y sistemas sociales…, pero siguieron muriendo por millones a causas del hambre, las epidemias y la violencia. Muchos pensadores y profetas concluyeron que la hambruna, la peste y la guerra debían ser una parte integral del plan cósmico de Dios o de muerte o de nuestra naturaleza imperfecta, y que nada excepto el final de los tiempos nos libraría de ellas.
En las primeras páginas escribió tambien que, en los albores del tercer milenio, la humanidad se despierta y descubre algo asombroso. La mayoría de la gente rara vez piensa en ello, pero en las últimas décadas hemos conseguido controlar la hambruna, la peste y la guerra. Desde luego estos problemas no se han resuelto por completo, pero han dejado de ser fuerzas de la naturaleza incomprensibles e incontrolables para transformarse en retos manejables.
Por lo tanto, argumenta que no necesitamos rezar a ningún Dios ni a ningún santo para que nos salve de esos tres problemas. Sabemos muy bien lo que es necesario hacer para impedir el hambre, la peste y la guerra, y generalmente lo hacemos con éxito.
“De ahí que, aunque presidentes, directores ejecutivos y altos mandos del ejército siguen teniendo sus agendas diarias llenas de crisis económicas y conflictos militares, a escala cósmica de la historia, la humanidad puede alzar la mirada y empezar a completar nuevos horizontes.
“Si en verdad estamos teniendo bajo control el hambre en la peste y la guerra, ¿qué será lo que las reemplace en los primeros puestos de la agenda humana? Cómo bomberos en un mundo sin fuego, en el siglo XXI la humanidad necesita plantearse una pregunta sin precedentes, ¿qué vamos a hacer con nosotros?
“En un mundo saludable próspero y armonioso, ¿qué exigirá nuestra atención y nuestro ingenio? Esta pregunta se torna doblemente urgente dados los inmensos nuevos poderes que la biotecnología y la tecnología de la información nos proporciona, ¿qué haremos con todo ese poder?”
El autor antes de dar respuesta a esa pregunta aborda los temas del hambre, la peste y la guerra. En la primera parte nos plantea cómo el homo sapiens conquista el mundo; en la segunda, cómo le da sentido al mundo; y en la tercera cómo pierde el control.
El libro, se compone de 11 capítulos que nos presentan una realidad de lo que hubo antes de esta realidad y lo que nos espera a partir de los avances que se han registrado y los que vienen que darán forma a la realidad de futuro.
Homo Deus: Breve historia del mañana es un libro cargado de información histórica, incluso filosófica, que nos hace pensar de dónde venimos y hacia dónde vamos.