En los últimos años he conocido varias historias de terror financiero entre amigos. Muchos gestionaron mal sus préstamos en instituciones bancarias y pagaron muy caro sus tarjetas de crédito. Otros cayeron en estafas de barrio, como la pirámide “Flor de la Abundancia”, una idea mágica de invertir dinero y recibir hasta ocho veces lo invertido sin trabajar. El común denominador fue: gastaron más de lo que ingresaron e invirtieron con ignorancia. Mis amigos me confirmaron que nadie les enseñó de pequeños a desarrollar su inteligencia financiera. Aprendieron en la calle con muchos errores.
CONTEXTO NECESARIO
La educación financiera no es nueva, se remonta a la segunda mitad del siglo pasado en Estados Unidos con la creación de diversas instancias enfocadas en el tema y después, entre 2003 y 2005 con la introducción de un programa internacional de educación financiera: “Recomendación sobre los Principios y Buenas Prácticas de Educación y Concienciación Financiera” realizado por la OCDE.
En México, se registran tres momentos como punto de partida para la educación financiera. El primero en 2004 cuando Banamex implementó los primeros cursos de educación financiera; en 2006 con la inauguración del Museo Interactivo de Economía (MIDE) y, finalmente, en 2007 cuando se introduce en la Ley de Protección y Defensa al Usuario de Servicios Financieros el establecimiento de programas educativos en materia de cultura financiera.
Después en 2008, la Condusef organizó la Semana Nacional de Educación Financiera para concientizar a la población en general sobre la importancia que ésta tiene para mejorar su bienestar. La semana se realiza año con año, sin embargo, en México, la educación financiera se encuentra en un nivel bajo, lo que se refleja en el desconocimiento de derechos y obligaciones, y en malos hábitos de consumo.
Ante este escenario, en este año en el IMEF nos abocaremos a la educación financiera e inclusión como elementos del desarrollo económico de México. Nuestra presidenta nacional, Gabriela Gutiérrez, considera que la educación financiera es la base para la toma de decisiones a todos los niveles, porque al estar informados, tanto las empresas, como las familias, personas y gobiernos se puede elegir lo mejor.
DESDE CASA
De manera personal, todos podemos lograr avances. Tú puedes ayudar a tus hijos o sobrinos a desarrollar una inteligencia financiera desde los tres años. ¿Cómo hacerlo? Primero capacitándote para que con conocimiento puedas informar. Aquí te comparto cinco prácticas que he utilizado con mi hija Leyre:
1. Háblales de manera clara de cómo ganas el dinero y cubres las necesidades de tu familia.
Que entiendan que el dinero no cae del cielo, ni sale de una tarjeta, ni de un cajero automático cuando lo necesitas. Explícales que trabajas todos los días para comprar las cosas que necesitan.
2. Contágiales tus hábitos de ahorro y muéstrales las diferencias entre necesidades y deseos. No seas un consumidor compulsivo.
3. Cómprales una libreta y ayúdalos a anotar todos sus ingresos y gastos. Hoy es el mejor día para enseñarles a tus hijos el valor del dinero.
4. Demuéstrales con el ejemplo. Si te ven hacerlo, seguro lo repetirán. Lamentablemente desde niños hemos sido condicionados a creer que hay cosas que no podremos conseguir, que estamos limitados, que no somos capaces.
5. Ten un pensamiento de abundancia. Muchos amigos dicen que desean abundancia y riqueza, pero inconscientemente la están rechazando todo el tiempo y esto es, principalmente, porque contamos con una programación mental que nos impide pensar en el dinero como algo bueno. Tus hijos te observan en todo momento. Si tienes una actitud de abundancia y una mentalidad próspera, tus hijos te seguirán.
El hogar sigue siendo la primera escuela de finanzas para los niños. En tus manos está el heredar a tus hijos buenos hábitos financieros que les ayudarán a alcanzar sus metas en la vida. El ahorro es la búsqueda de la prosperidad financiera. Sin embargo, lo más importante siempre va a ser tu familia, el dinero sirve para obtener cosas, pero el verdadero valor está en tus seres queridos.
En este año en el IMEF nos abocaremos a la educación financiera e inclusión como elementos del desarrollo económico de México, porque la educación financiera es la base para la toma de decisiones a todos los niveles.