El año 2021, al igual que los dos que le antecedieron, fue de retos y de recuento de los daños y de los logros, porque a pesar de continuar en un entorno macroeconómico adverso, la recomposición de las empresas fue factor indispensable; es decir, las estrategias y las acciones no podían cesar, porque simple y sencillamente las empresas no podían parar.
En ese contexto se pudo corroborar que el rol del CFO es uno de los que más ha evolucionado en el ámbito empresarial, por los nuevos estándares de los negocios y por que ahora cuenta con un amplio conocimiento del negocio a través de la interacción continua con los sistemas que participan en los procesos de sus diferentes áreas, aunados a las habilidades estratégicas, al cumplimiento regulatorio, a las nuevas interacciones con los clientes y proveedores, así como al impulso de la experiencia de los colaboradores en un contexto cambiante, entre muchos otros temas que demandan el incremento de la agilidad para una mejor gestión financiera.
Ante esta vorágine, el reconocimiento al trabajo de los CFO se ha hecho más que merecido por dos razones: comunicar a la comunidad financiera y empresarial las estrategias, o el cómo y para qué, de las medidas que han emprendido los CFO, y transmitir ese conocimiento, es decir, predicar con el ejemplo de quienes por su trabajo se han distinguido como los mejores y han llevado a sus organizaciones a una posición de primer nivel.
Situación que no es fácil en cualquier momento, y menos desde hace casi tres años cuando tres contextos: contingencia sanitaria, cambio climático y conflicto bélico requieren actuar en un entorno de incertidumbre con estrategias, así como con acciones rápidas y concretas que son, precisamente, las que le han permitido al CFO ser uno de los principales protagonistas en la creación de valor de las organizaciones.
Y porque el CFO se ha convertido en uno de los principales protagonistas en la creación de valor de las organizaciones es que en 2017 nació el Reconocimiento al CFO del Año IMEF como una iniciativa anual del Instituto Mexicano de Ejecutivos de Finanzas para reconocer el liderazgo y logros de los Directores Financieros en el éxito de las empresas.
En el corto tiempo, el IMEF ha podido decir que se ha vuelto una prestigiosa tradición pertenecer a la lista del CFO del año y que estar entre los 10 mejores es, por tanto, una distinción y una mayor responsabilidad como líderes que inspiran a colegas y a las nuevas generaciones en los caminos a seguir en un mundo cada vez más complejo que requiere conocimiento y creatividad.
Los CFO ganadores en 2022 (tomando en cuenta su desempeño en 2021) fueron en la categoría de más de 15,000mdp Luis Eduardo Ramírez Herrera, Grupo Bafar; y en la de entre 1,500 y 15,000 mdp Moisés Flores Botello, CFO de Kavak.
Si bien, desde hace seis años el IMEF distingue a los profesionales que se desempeñan en el ámbito financiero demostrando capacidades y logros excepcionales al combinar la excelencia y el liderazgo con integridad, responsabilidad y enfoque social, el entorno actual amerita doblemente que esas aptitudes y habilidades sean difundidas en la comunidad empresarial y de negocios.
LOS MEJORES
En la edición 2022, fueron seleccionados 10 finalistas, cinco en cada una de las dos categorías, la correspondiente a empresas con facturación mayor a 15,000 millones de pesos (mdp) y la de las empresas con una facturación entre 1,500 y 15,000 mdp.
En el primer grupo los finalistas fueron María Guadalupe Sánchez Huerta, Seguros Monterrey New York Life; Antonio Suárez Lara, Grupo Coopel; Luis Eduardo Ramírez Herera, Grupo Bafar; Alejandra Enríquez Martínez, Grupo Surman; y Rafel Contreras Grosskelwing, Alsea.
En el segundo grupo Gabriel Ramírez Fernández, Fibra Shop; Roberto Jesús Herrasti Real, Grupo Helvex; Moisés Flores Botello, Kavak; Jordi Ferrán Casanova, Grupo Hunan; y Benjamín Gonzalo Ampudia Álvarez de Grupo Idesa fueron los finalistas.
Los CFO ganadores en 2022 (tomando en cuenta su desempeño en 2021) fueron en la categoría de más de 15,000 mdp Luis Eduardo Ramírez Herrera, Grupo Bafar; y en la de entre 1,500 y 15,000 mdp Moisés Flores Botello, CFO de Kavak.
Entre los logros de Luis Eduardo Ramírez Herrera destaca el Private placement de 150 millones de USD a una tasa fija de 3.56%, a un periodo promedio de 5 años con un bullet, sin garantía, sin rating y sin avales, que permitió al grupo una estructura financiera sólida para su plan de crecimiento de los próximos 5 años.
En los de Moisés Flores Botello sobresale ser el responsable directo de los levantamientos de capital más grandes en la historia de México al momento del levantamiento: Series B, C, D y E respectivamente, para un total consolidado de +1.5 Bn USD, de los cuales +1.1 Bn sucedieron en 2021. Estos levantamientos fueron las primeras inversiones en México de varios fondos y, en muchos casos, las inversiones más grandes de sus portafolios.
Para Luis Eduardo Ramírez Herrera lograr lo que ha hecho Bafar no puede ser posible sin gente comprometida; sin gente que esté todos los días esforzándose por hacer su trabajo de la mejor manera; “a los que tenemos la oportunidad de dirigir nos toca recibir el reconocimiento que es para el equipo. El éxito no viene solo viene en colectivo”, dijo.
“Creo que en nuestro caso tuvimos un reto diferente al de muchos de ustedes. Nosotros éramos una empresa que estaba en proceso de crecimiento, nos agarró la pandemia cuando acabamos de levantar la serie C que fue la del unicornio y había dos cosas que pasaban al mismo tiempo: por un lado los inversionistas nos decían ‘vayan con todo, crezcan, sigan’ y, por otro, veíamos la realidad que estamos viviendo todos: el mundo se estaba encerrándose”, dijo Moisés Flores Botello.
Para el IMEF esos logros ameritan ser difundidos en la comunidad empresarial y de negocios.