En este artículo hago un recorrido de los interesados en Banamex y las razones por las que demostraron su intención de adquirir el banco más antiguo de México, así como los motivos por los cuales desistieron, ya que entre unos y otros están los elementos que podrían esbozar los elementos para dar forma a un nuevo Sistema Financiero.
ENUMERADOS, PERO NO NECESARIAMENTE POR LA IMPORTANCIA
1. No se pusieron de acuerdo. En un inicio se mencionó la posibilidad de que un grupo denominado “Empresarios por la 4T”—liderados por el empresario de Monterrey Javier Garza Calderón—pudieran adquirir las acciones de Banamex, como ellos mismos lo sugirieron. Al día de hoy esa posibilidad parece cuesta arriba a pesar de sus casi 60 mil asociados, debido a que realmente esa agrupación no existe formalmente. Iniciada una consulta interna entre la cúpula, la respuesta ha sido magra o negativa por parte de quienes dicen formar parte de ella. Hoy se sabe que algunos miembros de aquella organización están tocando la puerta a sus socios norteamericanos para interesarlos en el tema.
2. Los ex banqueros. Otro grupo potencial, corresponde a empresarios que ya fueron banqueros y que conocen bien al banco, inclusive ya conocieron el data room. Este grupo lo encabeza Antonio del Valle Ruiz (fundador del ex Banco Bital y actual dueño de BX+) e irían en equipo con Alfredo Harp, Roberto Hernández, Valentín Diez Morodo, Eduardo Tricio y Alonso de Garay. También se había mencionado a Carlos Slim (quien no lo ha negado). Este grupo es representado ante Banamex por Tomás Ehremberg, ex ejecutivo del banco y hoy director de BX+. Se menciona que en su vinculación ante el gobierno reaparecería Guillermo Ortiz, ex gobernador del Banco de México; sin embargo, el 8 de julio se anunció en medios la baja de la puja por Banamex de Antonio del Valle, presidente vitalicio de BX+.
3. Sin definición, pero con solvencia. El Consejo de Administración de BBVA no se ha referido a la adquisición ni ha definido su posición sobre el tema. Pero sobre la misma materia acordó, el pasado 15 de noviembre, destinar parte de los recursos obtenidos luego de vender su filial en Estados Unidos a la adquisición del 50.15% del banco turco Garanti, con lo que ahora va por el control total del mismo. La adquisición empezó el uno de abril de este año. La inversión fue de 1,578 millones de euros.
4. Por razones de marketing. Banco Azteca levantó mediáticamente la mano más por razones de marketing que por tener posibilidades reales de comprar el banco ofertado. Los temas que más ocupan el verdadero interés de su propietario Ricardo Salinas tienen que ver más con los cobros de impuestos pendientes por parte del SAT, por lo que no tendría el apoyo del Gobierno para emprender esa aventura.
5. Interés no, tampoco dinero. Los demás bancos en México —la mayoría de nicho y no de consumo, como Mifel— están analizando la forma de navegar más ligeros hacia la salida de la crisis del Covid, que aún no ceja, como para embarcarse en un proyecto que está lejos de sus posibilidades.
6. En problemas. HSBC ha bregado por dos años para juntar 6 mil millones de dólares a fin de dedicarlos a reforzar su mercado natural que es el Asia. Principalmente vendió su banca de consumo en Estados Unidos, Francia y antes en Rusia, además de dar un paso atrás en el negocio inmobiliario en Londres. En ese banco nadie está pensando en cambiar la dirección en 180 grados. Peor aún, el banco se encuentra hoy atascado en Rusia sin poder siquiera mencionar la palabra “guerra” porque podría perder su inversión en Moscú por casi mil millones de euros.
Hoy está en la mesa la separación HSBC en dos bancos para que la sede de Hong Kong no esté sujeta a las normas bancarias de occidente. El objetivo es que no les vuelva a pasar como cuando Londres le prohibió repartir dividendos por el Covid en 2021 o que Estados Unidos lo obligó a colaborar en el proceso contra Huawei, que es algo que el gobierno de China no olvida. Lo que acrecienta la posibilidad de su escisión es que a la filial china se le ha obligado a tener a un miembro del Comité del Partido Comunista Chino en su Junta de Gobierno.
En lo que respecta a México todo indica que HSBC será el próximo banco extranjero en vender sus activos para reforzar sus objetivos en Asia. En este escenario el postor natural sería al Banco Santander.
7. Quiere, pero no puede. En Banco Santander están más que convencidos de que México no permitirá que dos bancos españoles tengan la absoluta preeminencia en el mercado. Por eso su presidenta Ana Botín anunció el 13 de marzo de este año que sólo compraría Banamex “a un buen precio” y que “no emitirá deuda para hacerlo”, y además con la condición de que el gobierno mexicano reciba su oferta con los brazos abiertos.
Ana Botín se reunió el 21 de abril con el presidente Andrés Manuel López Obrador para poner a disposición, sin cobro, sus 600 sucursales en Estados Unidos para el envío de las remesas de los migrantes y hablar en nombre de las empresas españolas en México. En el programa de Bloomberg de David Westing (mayo 2, 2022) Ana Botín señaló que solo comprará Banamex en efectivo. Quiso decir que sin necesidad de hacer una ampliación de capital. “Hay mucho crecimiento orgánico para nosotros en México sin comprar Banamex. Dicho esto, y quiero ser muy clara, solo compraremos Banamex si podemos pagar en efectivo. No emitiremos acciones del grupo, ni a nivel de la subsidiaria de México”. Puntualizó inmediatamente que el grupo no necesita de Banamex para crecer en el país azteca.
A pesar de lo anterior las señales cambiaron en la semana que inició el 20 de junio cuando se supo del nombramiento como Consejero Delegado de Banco Santander a nivel mundial del mexicano Héctor Grisi Checa, director general de Banco Santander en México, quien fue sustituido por Felipe García Ascencio.
Santander contrató a Credit Suisse y Goldman Sachs para concretar una oferta por Banamex que, según Credit Suisse, podría bordear los 9,540 millones de dólares. Sin embargo, el 22 de julio se conoció que Santander informó a la Comisión Bancaria de España que su oferta había sido rechazada por lo que no continuaría con las siguientes etapas del proceso tras haber presentado una oferta vinculante. “Con motivo del interés por la participación de Banco Santander en el proceso que está llevando a cabo Citigroup en relación con la potencial venta de ciertos negocios de su operativa en México, Santander confirma que presentó una oferta no vinculante y que, tras haber sido sometida a la consideración de Citigroup, el banco ha sido informado de que no continuará en las siguientes etapas del proceso”. Lo anterior se publicó en el periódico El País el 22 de julio y la información fue corroborada por medios nacionales.
8. Sin futuro. Inbursa de Carlos Slim manifestó el 27 de abril que tiene interés en Banamex, pero se conoce que no tiene entre sus planes ofrecer banca de consumo en México, sino en que esa institución siga siendo una palanca para financiar los proyectos del grupo. En consecuencia, lo que le interesa de Banamex es una parte y no el negocio de la cartera de consumo. Pero precisamente la parte que le interesa a Inbursa es la que Citicorp no quiere vender: la banca corporativa, de modo que la postura del banco de Slim no tiene futuro.
9. Sí, pero quién sabe. Banorte, donde el Ingeniero Carlos Hank González apenas posee menos del 14% de las acciones frente a los gigantes Fidelity, Teachers, Ashmore, Calpers, Temasek y BlackRock entró prácticamente para promover una acción colectiva a fin de sopesar su participación en la operación de la venta. Se conoce que Carlos Hank no consultó a los accionistas preponderantes, aunque eso no les molestó del todo porque una entrada de activos al banco beneficiaría, precisamente, a los accionistas mayoritarios ya que los titulares mexicanos se estarían diluyendo un 9% y pasarían luego a tener solo alrededor del 5% en la nueva estructura. En ese esquema el control del banco pasaría a manos de cualquiera de los accionistas mayores, o sea un extranjero como BlackRock.
A pesar de lo anterior Banorte ha contratado a la Unidad de Inversión de Bank of America para que los asesore en la realización de una oferta “no vinculante”, es decir, sin compromiso firme de su parte.
10. Otro postor relevante. Según Bloomberg, sería la posibilidad de que el Grupo Larrea, asociado con Banca Mifel postularan la adquisición de Banamex. Sin embargo, se sabe que Larrea jamás ha pretendido tener un banco y lleva casi todas sus operaciones de financiamiento con la Casa de Bolsa GBM, por lo que no parece que la noticia tenga una base real. Por otro lado, la venta no está en la etapa de las ofertas, por piezas, de parte de los proponentes. El 27 de junio Mario Maldonado mencionó que hubo una oferta de Larrea de 6,500 millones de dólares, pero sin mencionar la fuente.
A pesar de todo se ha informado (julio 1, 2022) que Larrea habría contratado al inglés Barclays para que analice la conveniencia de invertir en la compra de Banamex y las secuelas financieras para el grupo por tal inversión. Unos días después (julio 27, 2022) José Yuste informó que “Germán Larrea está armando su grupo hasta con los dientes. Con él van varios empresarios de la talla de Eduardo Tricio, por ejemplo (Lala y Aeroméxico), pero no solo eso. Larrea contrató como asesor, nada menos y nada más que a Pedro Aspe Armella, exsecretario de Hacienda de Carlos Salinas de Gortari, quien después de su función pública estuvo en Protego”. Así, pronostica Yuste, “Pedro Aspe podría ser el próximo titular de Banamex”.
11. Siguen en la lista. El 26 de julio el periódico EL Financiero mencionó que Citi inició la segunda etapa de la venta, que Santander salió porque su oferta fue de 6 mil millones de dólares cuando Citi pretende 12 mil millones y que Banorte, Bailleres (a través de Valmex) y Larrea, además de empresarios de la comunidad judía “que trae Daniel Becker” se juntaron para presentar una nueva oferta “vinculante”. Que Bailleres es asesorado por Eduardo Cepeda, quien por muchos años ha estado a cargo de JP Morgan en México y detrás estarían Eduardo Tricio, Alonso de Garay y Antonio del Valle, principalmente, y que podría haber sinergias muy interesantes con su Aseguradora Grupo Nacional Provincial (GNP) producto de la posible adquisición.
12. Silencio y ruido. Pero no todo está enfocado en la iniciativa privada. El gobierno también podría estar en la lista de los posibles adquirientes. ¿Por qué o para qué? La Respuesta es sencilla, aunque en el contexto del sistema financiero en general podría no serlo. Es un hecho que el Banco de Bienestar no ha logrado cumplir con su objetivo de cobertura, por lo que la adquisición de Banamex por parte del gobierno de Andrés Manuel López Obrador significaría alcanzar la cobertura que se planteó. El gobierno buscaba que en enero de este año estuvieran listas todas las sedes del banco (2,700 sucursales), lo que no ocurrió. El retraso supera el 50%. No sería una operación sencilla, pero está en el radar.
¿QUIÉN SERÁ?
Mientras unos se suben y otros se bajan, un dato interesante es que Citi abrió el data room para la venta de Banamex el 14 de abril. Al parecer, la negociación no la lleva el director general en México, Manuel Romo, ni Jane Fraser en Nueva York, sino el segundo de a bordo mundial, el español Francisco Ybarra, director global del área de mercados de capitales, banca de inversión y banca privada en línea con Mark Manson, director de finanzas del banco y Manuel Falco, director general de industria global.
Citi necesita ahora contar con el producto de la venta en México pues acaba de obtener, nuevamente, su licencia de banco en Arabia Saudita de donde se retiró luego del 9/11, como resultado del compromiso en noviembre pasado entre Jane Fraser y el príncipe AlWaleed bin Talal para participar del proceso de privatización de las acciones de Aramco y otras empresas.
REVITALIZACIÓN DE LA AQRUITECTURA DEL SISTEMA FINANCIERO MEXICANO
En México, Banamex está siendo abordado por los potenciales adquirentes económicos que podrían afrontar el compromiso de la conducción del banco, y sería muy conveniente ver el análisis de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) y de la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV) con objeto de revisar el sentido para una revitalización de la arquitectura del sistema financiero mexicano, y con qué posturas y postores éste pudiera verse fortalecido.
Asimismo, como lo ha dicho el presidente, “una de las cosas que tenemos que cuidar, por ejemplo, es que ahora que se venda Banamex no se despida a los trabajadores de manera masiva, porque estamos poniendo algunas condiciones: La primera es que sea capital mexicano. La segunda que los que participen como accionistas estén al corriente en el pago de sus impuestos. La tercera que el patrimonio cultural de Banamex se quede en México. Y la cuarta es que no se despida a los trabajadores”.